79
Ella. Tan lista y tan bella. Ella. Tan agradable y leal. No todo es lo que parece ser. Las rosas, aunque bonitas, pinchan. Y tú tienes dos opciones, o no tocarlas ni acercarte. O dejar el prejuicio y quizás también el miedo al lado y entregarte a la posibilidad de tenerla. Que sea tuya. Pero, vaya. Mírate la mano: Parece que tus cicatrices están ahí por algo. ~CP