101 - Niña otra vez
No tienes que sentirte mal por el paso del tiempo.
A todos nos llega, y no es que debas dejarte atrapar, tampoco huyas de él. Lo más aconsejable es que saques toda tu artillería y combatas de frente. Es una batalla larga, muy larga, y de ti depende quién gane.
La gente va, y viene. Pero los verdaderos permanecen.
No debe asustarte el cambio, ni las idas y venidas de todo aquel que te rodea, solo debe preocuparte tus propias elecciones, decisiones, que eres tú quien tiene el rumbo de tu vida. Tú decides el tiempo, el espacio y el momento.
Qué, cómo, cuando, dónde, por qué.
Preguntas a las que solo tú puedes darle respuesta.
Y mira y analiza y decide, porque eres tan sabia que los años te envidian.
No hay temor. Ni hay melancolía.
Sabes lo que hay, siempre lo supiste.
Eres una niña, una niña mayor, siempre lo fuiste.
Y mientras algunos quieran fingir madurez, tú siempre la tendrás aún detrás de esa sonrisa infantil que quizás te caracteriza. Porque la madurez está dentro, con las experiencias, y la madurez está en decidir como de rápido quieres que pase. O de lento. O ahora una pausa.
Como ahora. Una pausa.
Solo una.
Porque ahora es solo un momento, pero después despiertas de este pequeño inciso y sigues con tu vida, esa que tu te has construido mientras has crecido tanto que todos te admirarían desde sus raíces de las que no se despegan.
Y ahora sigue. Tú camino es largo y tus piernas resistentes. Aún queda mucho por andar.
~Cindyfresi
A todos nos llega, y no es que debas dejarte atrapar, tampoco huyas de él. Lo más aconsejable es que saques toda tu artillería y combatas de frente. Es una batalla larga, muy larga, y de ti depende quién gane.
La gente va, y viene. Pero los verdaderos permanecen.
No debe asustarte el cambio, ni las idas y venidas de todo aquel que te rodea, solo debe preocuparte tus propias elecciones, decisiones, que eres tú quien tiene el rumbo de tu vida. Tú decides el tiempo, el espacio y el momento.
Qué, cómo, cuando, dónde, por qué.
Preguntas a las que solo tú puedes darle respuesta.
Y mira y analiza y decide, porque eres tan sabia que los años te envidian.
No hay temor. Ni hay melancolía.
Sabes lo que hay, siempre lo supiste.
Eres una niña, una niña mayor, siempre lo fuiste.
Y mientras algunos quieran fingir madurez, tú siempre la tendrás aún detrás de esa sonrisa infantil que quizás te caracteriza. Porque la madurez está dentro, con las experiencias, y la madurez está en decidir como de rápido quieres que pase. O de lento. O ahora una pausa.
Como ahora. Una pausa.
Solo una.
Porque ahora es solo un momento, pero después despiertas de este pequeño inciso y sigues con tu vida, esa que tu te has construido mientras has crecido tanto que todos te admirarían desde sus raíces de las que no se despegan.
Y ahora sigue. Tú camino es largo y tus piernas resistentes. Aún queda mucho por andar.
~Cindyfresi
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